sábado, 29 de agosto de 2009

Fragmentos de historias cortas



El diario abierto sobre la mesita de la cama. Restos de café en la taza y un cigarro a medio terminó. Las aspirinas han rodado al piso. Ella duerme gloriosamente infantil, apenas un respiro asegura que vive.

Fechado el 13 de noviembre del 2008 se lee en una página del cuaderno azul:

Hoy te metí en una caja, o lo que queda de ti. Apenas te notas en la habitación, hay una muñeca que vacila en el estante. He sufrido un dolor de cabeza toda la tarde que me ha impedido ir al cine, aún así no era tan buena idea, porque no tenía compañía. Sigue siendo difícil salir sin buscar un rostro junto a mi.

Me había negado hacer limpieza, hasta hoy, recogí las fotos. Me he dado cuenta que has cambiado de lugar continuamente. Desde cajones apartados hasta debajo de la almohada. Hoy te he dejado en un rincón junto a unos, no sé que cosas y en no sé que mueble. Te has vuelto pequeño, diminuto.

El reloj marca 7:30 de la mañana, pronto habrá de sonar el despertador. Ella mueve su cuerpo con un gesto suave que aminora la tristeza de la luz...

(Mon)

jueves, 27 de agosto de 2009

Citando a Duras y una nueva Marguerite

Sigo con la fiebre de está autora y sin darme cuenta he leído más de 7 obras de ella y tres más que aún no termino. No estoy segura si eso es demasiado o no, pero es mucho más de lo que suelo leer para un solo autor.

Hoy he terminado una bella historia llamada; Emily L. de mi admirada Duras. Les dejo una carta tan fuerte y tan desdichada que extraje de la novela y unas citas que resumen la atmósfera de aquel bar a la orilla del mar, de esos rostros, de esas historias que entre diálogos entrecortados; desvanecidos en la luz tenue, corre el tiempo de partida fundando miradas ya casuales y nunca desapasionadas.

"He olvidado las palabras para decírtelo. Las sabía, y las he olvidado, y aquí le hablo en el olvido de esas palabras. Contrariamente a todas las apariencias, no soy una mujer que se entregue en cuerpo y alma al amor de un solo ser, ni siquiera a aquel que más quiere en el mundo. Soy un ser infiel. Me gustaría mucho encontrar las palabras que había guardado para decirle esto. Y he aquí que me acuerdo de algunas. Quería decirle lo que creo, que había que conservar siempre ante uno –he aquí la palabra, me acuerdo- un lugar, una especia de lugar personal, eso es, para estar solo y para amar. Para amar no se sabe qué, ni a quién, ni cómo, ni cuánto tiempo. Para amar –he aquí que de pronto me acuerdo de todas las palabras...- , para conservar en sí el lugar de una espera, nunca se sabe, de la espera de un amor, de un amor quizá sin destinatario todavía, pero de esto y sólo de esto, del amor.

Quería decirle que usted era esta espera. Usted se ha convertido por sí solo en la cara exterior de mi vida, aquella que nunca veo, y así permanecerá, en el estado de este desconocido por mí en que se ha convertido. No me conteste nunca. No conserve esperanza alguna de verme, se lo suplico.

Emily L. "

Continuación...

  • Ya ti te faltaba esta contradicción, la de hallarte en un amor que te llenaba y pedir auxilio a otro.
  • La lógica ciega del viaje alrededor de la tierra, es ella quien la ha descubierto.
  • Tú inventaste por mí. Yo no tengo nada que ver con la historia que viviste conmigo.

Como no siempre se puede leer al mismo y lo mismo ahora otra Marguerite está vez Yourcenar. Me va seduciendo de página en página algo más que el pensamiento. Y como frente a la imposibilidad de decir demasiado acerca de ella como mujer y su escritura ella misma diría:

No hay más secreto que una existencia femenina

martes, 25 de agosto de 2009

A que día!!!!!

¿Quién dijo que la lluvia, un lugar lejano y los nervios eran una buena combinación?

Ha pues eso sucedió y creanme, todos esos elemento hacen ¡bum!

La ponencia no fue tan mala después de todo, recordé que lo infinitamente atractivo e interesante del tema del duelo.

La lluvia por otra parte se desquito y dio punto final a una larga jornada de camiones, micros, taxi, aventones y un número disperso de lugares desconocidos. Sólo hasta hoy hago recuento, porque tengo la cabeza seca y menos frío que ayer.

Falta Aguascalientes y algún otro congreso al que podamos asistir.

viernes, 21 de agosto de 2009

Combo de palomitas...



Tres monos.No veo, no escucho, no hablo

Nuri Bilge Ceylan.
Turquía-Francia-Italia, 2008.


Import/Export

Ulrich Seidl. Austria, 2007.


Había olvidado mencionar dos películas que se están exhibiendo en la Cineteca, las dos recomendables más que para comer palomitas y sentarse en la butaca, para ver y leer historias lejanas, ficticias si uno es tan escéptico cómo para creer que eso no sucede (a claro no es que yo crea que son reales, sino que reflejan realidades), pero sí para reflexionar sobre nuestra propia realidad.
No dejen de verlas, de dejar sus comentarios si lo hacen.



martes, 18 de agosto de 2009

He olvidado, a veces sucede sin quererlo, sin querer se olvida.

Detectives Salvajes...


He terminado de leer una novela larga de historias cortas.
Cada historia se repliega en sí misma hasta tocar con tentáculos suaves a veces imperceptibles a los demás. Hay nombres que se repiten como siempre, la familiaridad de las palabras.
Preguntas en el aire, y el final no parece final, sino la hecatombe de algo que sucedió líquidamente. Tan salvaje, lastimosamente salvaje, o real, viseral.